La concejalía de Educación sigue desarrollando actuaciones, coordinadas con los equipos directivos de los centros educativos y con la colaboración de la Policía Local a través de la figura del agente-tutor, con el objetivo de facilitar que los alumnos que, por motivos ajenos a ellos presenten dificultades, puedan continuar con la máxima normalidad posible el desarrollo del curso escolar de forma no presencial a la que ha obligado la crisis sanitaria derivada del Covid-19.
Desde que se declarara el Estado de Alarma y se decretara el confinamiento de la población, desde el departamento de Educación, en una acción coordinada con los centros escolares y a través de la figura del agente-tutor y del personal de la concejalía, se puso en marcha un protocolo de actuación que se ha desarrollado en dos fases. En la primera, que arrancó en los momentos iniciales del confinamiento con 67 actuaciones, se trasladó al alumnado de colectivos vulnerables y sin acceso a medios digitales, el material educativo necesario para que pudieran seguir las tareas escolares, entre ellos las tablets y los dispositivos de acceso a internet facilitados por la Conselleria de Educación.
En la segunda fase, desarrollada entre el 27 y el 30 de abril, coincidiendo con el inicio del tercer trimestre escolar, personal de la concejalía y el agente-tutor visitaron a más de 300 familias en sus domicilios para hacerles llegar el material necesario para cada alumno de las etapas de educación infantil (3-5 años) y de primero y segundo de primaria.
El concejal de Educación, Bartolomé Úbeda, ha asegurado que su departamento “seguirá trabajando para que esta situación repercuta lo menos posible en los colectivos más desfavorecidos”.