La intensificación de la vigilancia y la perfecta coordinación entre policía local, guardia civil y policía autonómica han provocado que la campaña de uva de mesa embolsada haya concluido sin robos.
A pesar de que las zonas rurales del término de Novelda son controladas durante todo el año, durante los meses de noviembre y diciembre esta vigilancia se intensifica para evitar sustracciones en las cosechas de uva de mesa, producto básico de la agricultura local, con una producción aproximada de 20 millones de kilos repartida en las más de 250 parcelas en cultivo que ocupan una extensión de casi mil hectáreas.
Para que esta vigilancia rural sea un éxito, como demuestra el hecho de que en esta campaña no se haya producido ningún robo, la policía local de Novelda, además de aumentar los efectivos destinados a este servicio y coordinarse con otros cuerpos de seguridad, cuenta con un mapa de zonificación de cultivos, en el que cada parcela en producción aparece detallada con sus coordenadas de ubicación y denominación de la variedad cultivada, lo que permite conocer la temporada de maduración del fruto (que lo hace susceptible de robo) y, por tanto, conseguir una mayor efectividad en su vigilancia.
Además también se controla la trazabilidad de los productos agrícolas, desde el propio campo hasta los puntos de venta al consumidor, con identificación de personas y vehículos que llevan a cabo las labores de vendimia.
La vigilancia rural, que la policía local lleva a cabo con vehículos todoterreno y motocicletas, ha contado por primera vez este año con la utilización de drones que han permitido el control de las zonas de cultivo desde el aire.