Con el corte simbólico del primer racimo por parte de la Ministra de Empleo, Fátima Báñez, arrancaba esta mañana la campaña de la uva de mesa embolsada con denominación de origen Vinalopó, una campaña que desde el consejo regulador auguran excelente en calidad y cantidad.
Acompañada por el presidente del Consejo Regulador, José Bernabeu, el Presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, el Secretario Autonómico de Agricultura, Francisco Rodríguez, y el Alcalde de Novelda, Fran Martínez, la Ministra ha procedido al corte simbólico de este primer racimo en una finca ubicada en el paraje de El Campet. Poco después, ya en el Centro Cívico y ante un auditorio integrado por representantes políticos y del sector agrario, Fátima Báñez valoraba el trabajo realizado por los agricultores de la zona que, ha dicho, han hecho “fácil lo difícil, al convertir una tradición en un producto de calidad con denominación de origen”. La ministra de Empleo, que destacaba los 14.000 puestos de trabajo directos e indirectos que genera el cultivo de uva de mesa, incidía en que Alicante es la provincia de España donde más ha crecido el empleo en el último año al tiempo que señalaba que “en materia de empleo no hay colores ni territorios, sólo compromiso, voluntad y responsabilidad” para ayudar a quienes hacen posible la creación de puestos de trabajo. En esta línea anunciaba la aprobación, por parte del Gobierno, de un Programa de Orientación para Parados de Larga Duración, dotado con 129 millones de euros en el presupuesto de 2016, que podrá beneficiar a 157.000 desempleados de la Comunidad Valenciana a los largos de sus dos años de duración.
Por su parte el Presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Uva de Mesa Embolsada Vinalopó destacaba en su intervención los beneficios de la agricultura para la economía de la provincia al tiempo que reivindicaba que se garantice “una renta mínima a los agricultores y que se resuelva definitivamente el problema del agua”. José Bernabeu, que apostaba por una “uva de calidad a un precio que permita vivir a los productores”, volvía a exigir agua para unas tierras que la necesitan y a un precio justo puesto que su escasez y el elevado coste de la misma es, en estos momentos, uno de los principales problemas del sector.