El Ayuntamiento de Novelda pondrá en marcha en los próximos días el sistema para la detección temprana del coronavirus a través del análisis de las aguas residuales del municipio, una herramienta que servirá para conocer la circulación del virus en la población, anticipar respuestas y frenar transmisiones.
Monitorear la circulación y los niveles existentes del SARS-CoV-2 en la población es el objetivo de estos análisis de aguas residuales que Aqualia, empresa concesionaria del servicio de agua potable y saneamiento, realizará durante las próximas cuatro semanas con muestras obtenidas en diferentes puntos de la red de alcantarillado de la ciudad.
El alcalde de Novelda, Fran Martínez, ha señalado que este método de vigilancia microbiológica “es una herramienta epidemiológica eficaz de alerta temprana que nos permitirá conocer de manera anticipada en qué estado general se encuentra y cómo circula el virus en la población, de manera que, con esta información, podamos anticipar una respuesta y adoptar las medidas concretas que fueran necesarias para tratar o minimizar posibles rebrotes”.
En este sentido el alcalde ha incidido en que la analítica de aguas residuales es un método de detección precoz y, a pesar de que “la incidencia del coronavirus en Novelda es baja y se mantiene en buenos niveles”, con 6 casos detectados en los últimos 14 días, lo que sitúa en 106 los contagios contabilizados desde el inicio de la pandemia, “no podemos relajarnos y es imprescindible seguir atendiendo las recomendaciones sanitarias básicas, como la distancia social, el uso de mascarilla y la higiene de manos, ya que son las únicas medidas que se han mostrado eficaces” para contener la expansión de la Covid-19.
En cuanto al proceso de análisis de las muestras, basado en la técnica PCR, se aplicará el método cuantitativo que permitirá conocer la cantidad de virus existente en cada una de ellas de forma que, al hacer el recuento de una serie histórica de varias semanas, se podrá constatar el posible aumento de carga vírica en las muestras obtenidas en un mismo lugar, lo que indicará si el grado de afección aumenta en las mismas zonas y, por tanto, adelantar la toma de decisiones para la prevención de la expansión de los contagios.
En principio está previsto que los análisis se realice durante cuatro semanas, aunque, como indicaba el alcalde, se podrá prolongar en el tiempo si se considera necesario para poder tener un “control real” de la situación de la pandemia en el municipio.